2.- LA TRAICIÓN Y TRAMPA DE ULULAN

    El tiempo siguió avanzando en nuestro TODO expandiendo el Mundo Intangible y el Mundo Cognoscible así como la diversidad de este último quién ofreció sus  primeras singularidades de las que ya hemos estudiado tres en este Blog y que son, clasificándolas por su orden de aparición: Atávar, los Fanteucos y los Vermilionis. Por ello el Supremo Hacedor decidió crear la siguiente tanda de Agentes Primigenios, los cuales fueron veintidós, para servir como Gobernadores de las Esferas de Existencia de las singularidades que aparecieron y para otorgarle a uno de ellos el estatus de Coordinador de los Gobernadores de las Esferas de Existencia. Además el Supremo Hacedor creo nuevas Esferas de Existencia para que el resto de Agentes Primigenios tuvieran un lugar en el que habitar y crear sus Cámaras de Existencia.

   Ululan desarrollo una gran amistad con Atávar quién era el único invitado a su Esfera de Existencia, Avalon, y allí está bien plasmada esta relación con unas obras de artes que representan ese vínculo poderoso. El Creador comenzó a recoger más frutos de valor añadido como las entelequias de Atávar, las ideas y sueños de los Fanteucos y el meliá producido por los Agentes Inducidos de los Vermilionis conocidos como Pilionis. Ícanus comenzó a tener cada vez más trabajo al tener que recaudar más frutos útiles para el Creador valiéndose de sus secuaces los Aurifos y Enfué comenzó a ponderar las inyecciones de recursos procedentes de Brama según los frutos de valor añadido ofrecidos al Supremo Hacedor.

   Por otro lado corrían los rumores en el Mundo Intangible de que Ululan estaba fabricando una joya de enormes proporciones con un nuevo material que el había descubierto y que su belleza era digna de admirar, sin embargo esto era imposible porque Avalon estaba cerrada para cualquier Agente Primigenio y solo el Creador podía saber que es lo que estaba sucediendo allí aunque por ciertos motivos no lo hizo. Sin embargo Anu seguía convocando a Ululan a encuentros bilaterales con el Creador donde lo que sucedía era un autentico misterio aunque fue bien sabido en el Mundo Intangible que Ululan pidió su ascenso al Mundo Divino debido a que su evolución mental había llegado a ciertos limites que ya no podía franquear y porque ya tenía suficiente confianza con el Creador para exponerle su mayor ambición, pasar de ser un Agente Primigenio a un Agente Origenio. Pero su petición fue rechazada salvaguardada en una explicación que expresaba que esa habilidad no estaba al alcance del Supremo Hacedor y que era imposible para Él llevar a cabo esa tarea.

   Desde entonces cuentan que Ululan quedó muy tocado y dejó de asistir a las convocatorias que Anu le hacía llegar tanto para encontrarse bilateralmente con el Creador como para asistir a las reuniones multilaterales de los veintisiete Agentes Primigenios. Incluso al tener secuaces bajo su mando era convocado al sínodo del Coordinador de Gobernadores a las que también rehusaba asistir. Ululan se encerró en Avalon y comenzó a llevar a cabo acciones un tanto extrañas como la fortificación de su Esfera de Existencia así como a aislarse del resto de sus hermanos mayores (cuatro) y sus hermanos menores (veintidós). Solo se sabía sobre Ululan que no paraba de trabajar en su Esfera de Existencia y en su evolución mental. El Creador lleno de amor y comprensión hacia todos los elementos de su creación toleró esta actitud de Ululan pese a que esperaba de él que dirigiese su atención hacia los puntos mas peculiares y singulares del TODO.

   Cuando parecía que Ululan no quería saber nada de nadie debido a su aislamiento durante un largo período de tiempo este llamo la atención del Creador después de mucho tiempo sin hacerlo. Quiso presentarle una nueva joya que superaba con creces la belleza y el estilo de la primera que le dedicó (y que representó el primer fruto de valor añadido para nuestro Agente Origenio) y estaba hecha con un material nuevo que nunca antes había sido visto en el Mundo Intangible conocido como orná y que era producido por los letales Leviatanes. Este material reaccionaba a la atención puesta sobre él dando lugar a imágenes abstractas representadas por todo tipo de colores brillantes que daban lugar a unas formas singulares y estaba engarzada sobre el más blanco éter procedente del núcleo de Avalon que, como en la primera joya, poseía un dinamismo autónomo pero mas armonioso y sinérgico con respecto a todos los elementos de aquella obra de orfebrería. A su vez estaba imbuida con grandes cantidades de maná que aumentaban su brillo y que la convertían posiblemente en lo mas bello que se podía encontrar en el Mundo Intangible eclipsando incluso a Presea, el divino lucero epicentral.

   Ululan le pidió al Creador, antes de descubrir esta joya que fue incluso conocida con el nombre propio de Orop, que pusiera toda su atención en ella para alcanzar a ver el máximo potencial de brillo y belleza que podía alcanzar y así lo hizo el Creador. Y allí estuvo observándola durante una gran cantidad de tiempo lo cual dejo grandes cantidades de maná en Avalon. Sin embargo como respuesta a un destello de su intuición el Creador amplió su atención para darse cuenta que Ululan no estaba observando como lo solia hacer lleno de satisfacción el tiempo que este permanecía atendiendo a la obra. Entonces decidió retirar su atención para buscar a Ululan por Avalon pero, y aquí la trampa y traición de Ululan, no pudo. Su atención estaba emparejada a Orop de tal forma que no podía dejar de atenderla y fue entonces cuando en un gesto de comprensión se dio cuenta que debajo de aquel material misterioso se encontraba un portal mágico unido a un pasadizo que nacía del suelo y por el que no dejaban de entrar los Agentes Inducidos creados por Ululan, es decir, los Dracos. Ululan había imbuido a aquel material con hechicería para anclar la atención del Creador y a la vez que sirviera como portal para ascender por ella con el objetivo de alcanzar la mente del Creador. Ululan había traicionado a su Creador buscando dar el salto por su cuenta al Mundo Divino y nadie lo podía detener ya que el Creador con su omnipotencia era incapaz de romper aquel anclaje que retenía su atención sobre Orop. Por otro lado no dejaba de regar con maná a Avalon y por consiguiente a Ululan y sus secuaces lo que significaba de un ingenio tremendo para elaborar un plan maestro que tuvo que llevarle un largo periodo de tiempo urdir. Estos no representaban a todos los elementos que Ululan había tenido en cuenta para su plan maestro.

   Así Ululan comenzó a avanzar por la atención del Creador pero se dio cuenta que esta vez era distinto a aquella primera vez que ascendió a la mente del Creador para observar el Mundo Divino. Aquella vez el ascenso se produjo en un breve período de tiempo pera esta vez el avance por la atención del Creador hasta su mente era un camino a priori largo ya que desde el primer momento no detecto en el horizonte los elementos que manifestaban el umbral entre la atención y la mente del Creador que recordaba de su anterior visita a esta aunque si que reconocía el camino. Sin embargo Ululan decidió avanzar con un ejército de sus secuaces por si se encontraba con alguna resistencia a la hora de invadir la mente del Creador dejando la mitad de su ejercito de Dracos en Avalon liderados por Tian, su comandante. Además ya había revelado sus intenciones por lo que estaba claro que se lo jugaba todo a una carta. La carta de la traición al ser que le había regalado una confianza divina.


3.- LA GUERRA DE TODOS CONTRA ULULAN


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