MÁXIMA UTILIDAD DE LAS DISCIPLINAS

   Muchas veces en nuestra vida hemos deseado tanto alguna cosa que al final acabamos disponiendo de ella y tras utilizarla todo lo que hemos podido para obtener las distintas sensaciones que nos puede ofrecer la hemos acabado abandonando produciendo un claro contraste entre el deseo inicial y la nula utilidad final. Esto se debe a que al explotar esa fuente de sensaciones radicalmente al final no es capaz de ofrecernos ni la cuarta parte de las sensaciones que se producían en nuestro interior cuando tan solo imaginábamos con poder disfrutarla. Con este ejemplo quiero introducir un tema que es importante para mi y que quiero exponeros bajo el título de maximizar la utilidad de las disciplinas. Esta teoría sirve para cualquier disciplina como el deporte, las amistades o incluso el ir de compras pero en esta entrada nos vamos a centrar en las disciplinas espirituales.

   Hoy en día podemos encontrar muchísimas disciplinas espirituales como puede ser la oración, la meditación, el mindfulness, las plegarias, las libaciones, el yoga, la música (para mí es un arte espiritual) o incluso el ASMR (respuesta sensorial meridiana autónoma) y todas tienen una curva de utilidad que será diferente dependiendo de cada individuo en la que una variable importante es la frecuencia con la que las practicamos o el tiempo que intercalamos entre práctica y práctica. Cuanto mas tiempo intercalemos entre la realización de la misma disciplina mayor será la sensación de paz y placer que nos aporta pero llegará un momento en que por mas que bajemos la frecuencia en su practica no nos producirá más utilidad así como si repetimos su uso con una frecuencia muy alta al final nos acostumbraremos a la sensación que nos aporta y poco podremos sentir sus efectos llegando incluso a abandonar la actividad espiritual de que se trate.

   Por ello es importante prestar atención a que cantidad de tiempo debemos dejar pasar para maximizar la sensación interior que nos produce los efectos de su práctica la cual, en mi caso, no suele ser diariamente y que dependiendo del recurso espiritual me va bien intercalar diferentes tiempos entre su realización. A esto le llamo el tiempo de enfriamiento de una habilidad y es muy conocido en inglés como el "cool down" de las habilidades conocidas. Por ejemplo para mí el uso de la mente abstracta me produce una cantidad de sensaciones positivas suficientes utilizándola a diario sin embargo la meditación me produce paz interior si la practico cada tres días. La respuesta a un estímulo relacionado con el ASMR me produce la correspondiente respuesta si intercalo dos o tres días también y la práctica de la oración produce en mi efectos positivos si dejo correr un espacio dilatado de tiempo.

   El conocer la curva de utilidad personal de las disciplinas espirituales es importante pues las sensaciones positivas que sintamos nos hará interiorizarlas y darles la importancia que se merecen aunque no las practiquemos todos los días. De hecho en esto esta la clave, en darle la máxima utilidad a las disciplinas espirituales para con nosotros mismos y que nos sirvan para avanzar en el camino espiritual.

   En definitiva haz tus pruebas pertinentes prestando mucha atención y detecta cuando un recurso espiritual tiene un gran impacto sobre tu interior y el tiempo que tienes que dejar en medio para que vuelva a producirlo. A esto también podemos llamarlo el arte de conocernos a nosotros mismos.

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