APNEA HACIA LAS PROFUNDIDADES

   Dicen los neurocientíficos del momento que al ser humano cada vez le cuesta más mantener la atención sobre un tema o materia como resultado de la cada vez más sobreexposición que sufrimos a estímulos externos que nos rodean como puede ser el móvil o las organizaciones que intentan captar nuestra atención con diferentes fines. Y la verdad es que es una pena porque perdemos la habilidad y los beneficios de sostener la atención considerablemente en el tiempo, que es el tema sobre lo que trata esta entrada.

   Una apnea hacia las profundidades del conocimiento o la imaginación es el resultado de prestar atención durante una cantidad considerable de tiempo a una idea que nos servirá de guía para la inmersión. He definido a esta técnica como apnea debido a que cuando estamos totalmente concentrados durante un tiempo decente y prestamos atención a nuestra respiración esta tiende a relajarse junto con el ritmo cardíaco produciendo algo parecido a un cambio de presión de nuestras funciones fisiológicas e incluso me atrevería a decir que también mentales.

   La mente abstracta requiere de estas apneas para expresar su máximo potencial en forma de alguna idea o imaginación singular. Es decir, para llegar a concepciones originales de nuestro ser requeriremos de una concentración continua que a mi parecer conecta con los procesos intelectuales de la conciencia produciendo una sinergia con ella para llegar a manifestar un contenido relacionado con la guía que seguimos tal y como hacen a veces los buceadores que practican las apneas. La atención se acaba convirtiendo en una serena expectación capaz de detectar todos los elementos que se cruzan en nuestra mente relacionadas con la guía así como entretejerlos para construir un activo, normalmente complejo, que se parezca a lo que realmente estábamos buscando.

 Una forma de entrenar las apneas hacia las profundidades es practicando la meditación pues a través de esta vamos depurando el proceso de ir reduciendo los pensamientos mundanos y mecanicistas que se cruzan en nuestra mente y que rompen la continuidad de la concentración sobre lo que de verdad nos interesa. Cuando  llegamos al punto de no producir estos pensamientos sin ninguna utilidad estamos preparados para practicar estas apneas intelectuales que nos llevarán a elaborar frutos de bastante valor añadido así como a perfeccionar el arte de pensar.

   Otra técnica asociada a estas apneas es realizar movimientos mentales laterales cuando ya consideramos que estamos bien concentrados o bajo el efecto de la serena expectación. Estos movimientos laterales se basan en abandonar la guía inicial que nos hizo bajar hasta las profundidades y centrarnos en otros temas que tengamos en barbecho para acometerlos desde un estado del ser embriagado por tal capacidad de concentración. Así abordaremos temas y asuntos desde otro nivel más elevado abstractamente hablando que, de otra manera, no llegaríamos a abordarlo. También el movimiento mental lateral se puede dirigir a acciones (oraciones, alabanzas, plegarias, etc.) que tengan que ver con nuestra relación con los Dioses o Agentes con los que queramos entablarla por contar en esos momentos con una atención mas enfocada.

  Las apneas hacia las profundidades es una forma de entrenar la mente abstracta e incluso la mente concreta lo que nos permitirá ir optimizando el tiempo empleado para alcanzar esos niveles de concentración. También son estados mentales que nuestra conciencia detecta por el cambio de presión en la actividad mental y que aprovecha para producir ciertas revelaciones tanto propias como del Alma así como aumentan el grado de penetración de nuestra conciencia sobre nuestra mente. Por supuesto esta técnica es solo recomendable en los momentos de soledad para que nuestro entorno social no la corte y a su vez no nos juzguen como personas que no prestan atención al aquí y al ahora.