EL TEMA COMPLEJO DE LA ESPIRITUALIDAD

    Yo diría que no me equivoco si comparto con vosotros la idea de que cada vez la gente es más consciente de la importancia de la espiritualidad en la vida de un ser humano como modo de autorrealización personal en el sentido de que como contrapeso a la cada vez mas concentración de la riqueza material en el mundo nace la idea de que si asociamos nuestra autoestima a la riqueza material que tenemos en comparación con los ejemplos que copan los estímulos externos que recibimos el resultado será un amor propio escaso. Es decir, y en otras palabras, la espiritualidad nace en una gran parte de casos como causa de una pobreza cada vez más generalizada en el mundo. Y esto en muchos casos se traduce en la generación de unos nuevos líderes espirituales que tienen la intención de, a través de sus propios modelos, llegar a estar en la élite de esa minoría que goza de grandes riquezas materiales y fama, y no para dedicar sus mayores esfuerzos en cambiar un poquito el mundo para bien o al menos servir como plataforma para ello. Y siento utilizar la falacia de la generalización pero es que no sabría daros un ejemplo de que así lo hiciera (circunscrito al liderazgo espiritual en el presente, por supuesto que si que hay organizaciones e individuos no relacionados con la espiritualidad que si lo hacen).

   Sin duda esto menoscaba el concepto de la espiritualidad de forma contundente pues la espiritualidad es un concepto que nace con razón de ser propia y no como consecuencia de sufrir la escasez. Según mi modelo el tema espiritual nace como respuesta a mejorar las artes y las virtudes de una persona mediante un proceso de mejora continua que  es compatible con la riqueza material pero que está enfocada a volcar sobre la sociedad ese proceso de transformación interna que experimentamos. Es normal que si una persona es válida en la divulgación de su espiritualidad consiga riquezas y seguidores pero eso no debería quedarse ahí sino que toda esa comunidad con un potencial increíble debería conseguir ocuparse de las artes que nos engloban a todos a modo de caldo de cultivo para mejorar el bienestar del entorno que nos rodea. Debería forjarse un lobby espiritual encaminado a no conseguir cosas para su misma organización sino para ofrecer ideas e influencias que afectarán a la población en general para bien.

   Por no hablar de los movimientos religiosos existentes en el mundo con una tradición histórica relevante que transforman al sujeto para que este se adapte mejor al mundo y sea feliz pero que no son capaces de influenciar al poder pese a aglomerar a poblaciones de un número considerable de países con medidas para mejorar ligeramente el bienestar de la población en general. Las multinacionales se comportan como lobbies para influir en los políticos con el objetivo de seguir acrecentando su riqueza o al menos que esta no sea mermada sin embargo ciertas religiones con un número mayor de usuarios tan solo emiten recomendaciones si acaso lo hacen. La calidad de los seguidores de una religión o filosofía se mide por la integridad de estos y una parte de la integridad proviene de tener un mínimo de recursos garantizados para todos ellos con la idea de que no se acerquen por problemas de autoestima asociados a su miseria sino para que se acerquen a preguntar que es lo que se puede hacer y realicen una autocrítica de las ideas espirituales que siguen y persiguen pasando de la fe ciega al uso del raciocinio.

   Y es que parece que hay una correlación entre cuanta más espiritualidad se vuelve el ser humano más miseria podemos encontrar en el mundo. No hablo de un reparto de la riqueza equitativo para todo el mundo pues eso iría en contra de la meritocracia que tanto alabo pero si de acabar con ciertos problemas mundiales que indican que el tópico literario de carpe diem de algunos pocos ponen precio al valor de la vida según la zona del mundo que habites.

   Siempre he perseguido que la espiritualidad de uno mismo debe volcarse sobre las personas con las que convivimos ordenadamente. Es decir, si te consideras una persona espiritual deberías mejorar la vida de tu familia, después la de tu vecindario hasta llegar a la de tu ciudad y así progresivamente. Pues lo mismo deberían hacer las comunidades espirituales con un potencial importante al nivel geopolítico que les toque hasta llegar a conseguir unos mínimos de dignidad en el mundo. Es decir, a veces asociamos la vida espiritual y, poniendo un ejemplo, a limitarnos a ir al centro espiritual con cierta frecuencia y a trabajar, en un porcentaje de casos menores, nuestro interior para intentar ser felices caiga lo que caiga pero esto no debería ser así. Si te consideras una persona espiritual debes exigirte más conforme vayas ascendiendo en el sendero, debes defender la espiritualidad a capa y espada siendo un ejemplo a seguir y esto se consigue teniendo claro que hay que exportar la espiritualidad no con el objetivo de practicar proselitismo, que sin duda se dará si la calidad de tus acciones son elevadas, sino que debes hacerte consciente dentro de tus posibilidades de que hay que ir transformando el mundo desde lo pequeño hasta lo grande y de lo grande hasta lo titánico.

   Grandes acumulaciones de capital son a la vez grandes acumulaciones del potencial de desarrollo espiritual de muchas personas (el dinero es el tiempo de desarrollar artes por otros) y por otro lado la perdida marginal de riqueza por parte de una gran fortuna es mucho menor que la ganancia marginal de riqueza y serenidad por parte de una persona sin ningún tipo de recurso. Y no hablo de caridad sino de comenzar proyectos que no signifiquen la destrucción en otra parte del mundo de la riqueza de otras personas debido a la globalización (hay que enseñar a pescar y no dar peces).

   Se que estas palabras pueden sonar a que soy un soñador en busca de quimeras pero creo que si ponemos la espiritualidad en el lugar donde se merece esta debería ser una prioridad para todo el mundo una vez demostrado de la existencia de un Mundo Intangible mas allá de nuestro Mundo Cognoscible y, como consecuencia de ello, el trabajar el arte de servir a los demás así como la virtud de la generosidad es lo mínimo que se puede exigir a aquellos que quieran ascender a nuestra Esfera de Existencia y más cuando tienen el potencial de hacerlo sin cambiar un ápice su ritmo de vida en cuanto a nivel de consumo se refiere. No te vas a llevar nada material al Mundo Intangible o a tu futura reencarnación pero si que puedes desplegar acciones memorables para el Espíritu así como desarrollar un Balance de Situación Vital Superavitario a través del trabajo de las virtudes y las artes apropiadas. Además, mayor será el potencial para hacerlo si eres de los afortunados en tener una fortuna considerable.

   El tema de la espiritualidad aplicada es complejo pero más complejo es comprender como puede ser que a mayor espiritualidad en el mundo mayor concentración de riqueza exista hasta el punto de que la miseria avance en vez de reducirse, a no ser de la existencia de una sociedad secreta que sea capaz de comprar su ascensión con grandes cantidades de dinero, algo totalmente difícil de argumentar y de lo más conspiranoico.

   Frase célebre:

   "Para que triunfe el mal, sólo es necesario que los buenos no hagan nada" - EDMUND BURKE

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