LOS RECAUDADORES DEL CREADOR

   Ya hablamos del álveo divino de Brama que es gestionado por Enfué, un Agente Primigenio en una Esfera de Existencia casi inalcanzable para los Agentes del Mundo Intangible el cual inyectaba los recursos necesarios a cada Esfera de Existencia en forma de mayoritariamente tiempo y en ocasiones menos frecuentes en forma de maná dependiendo de la utilidad de la Esfera de Existencia correspondiente que suele depender mayoritariamente de dos factores que son la gestión de una singularidad por parte de esta y por otro lado de la cantidad de frutos de valor añadido que tanto la singularidad como su Esfera de Existencia elevan hacia el Creador.

   Hoy toca hablar del otro álveo divino que es el de ascensión de los frutos de valor añadido hacia el Creador o Supremo Hacedor y que se comporta de una forma distinta a Brama pues el procedimiento se lleva a cabo por los recaudadores del Creador, dependientes de otro Agente Primigenio, cuyo nombre es Ícanus, en otra Esfera de Existencia igualmente casi inalcanzable para los Agentes del Mundo Intangible. Pero en este caso el álveo no esta conectado siempre a cada Esfera de Existencia sino que los recaudadores aparecen cuando son llamados o convocados por el Gobernador de cada Esfera de Existencia cuando estos consideran que ya tienen un lote de frutos de valor añadido para el Creador lo suficientemente válido para ser digno de ser elevado.

  Dijimos que el formato en que se organizan los frutos de valor añadido que ascenderán tenían un formato inefable pero lo que si sabemos es que ese formato esta comprimido hasta tal punto de caber en las arcas divinas transportadas por los recaudadores. Los recaudadores son Agentes Inducidos creados por el Agente Primigenio encargado de ascender los frutos y son conocidos también por otro nombre que es Aurifos. 

   Los Aurifos tienen anatomía humana pero se diferencian en que su forma es mas alta y mas delicada que la de los Avatares de nuestros Agentes Inducidos y porque tienen dos colas de plumas que nacen de la parte superior de sus glúteos y que van rozando la superficie ya que la espina dorsal de las plumas no es rígida sino mas bien flexible. Estas pueden ser desplegadas hacia lo alto volviéndose entonces rígida dicha espina dorsal provocando un enderezamiento de las plumas en situaciones de combate o para hacer su propia reverencia. Las plumas se despliegan de una forma parecida a como lo hacen los pavos reales en nuestro planeta con la particularidad de que cada cola representa cuatro plumas que cuando son "erizadas" superan ampliamente a los hombros y al final de cada pluma aparece un ojo. A través de estos ocho ojos en total se rumorea que es capaz de mirar el Agente Primigenio encargado de gestionar este álveo divino produciendo un efecto de suma belleza para bien o causando terror cuando los Aurifos detectan una amenaza. Otra diferencia con respecto a la anatomía humana es que los Aurifos cuentan con cuatro brazos lo que los hace poderosos militarmente hablando y esto es debido a que cargan con los recursos que son valiosísimos para el Supremo Hacedor. Estos también se hacen valer de las plumas desplegadas para impulsarse con fuerza cuando así lo requieran aunque por el formato que adquieren las plumas cuando son desplegadas son incapaces de volar aunque sí de producir saltos poderosos. Lucen cabellos largos y su cabeza en la parte superior es mas ovalada verticalmente que la nuestra.

   El brillo de su Avatar es más poderoso que el brillo de nuestro Avatar interior representando la gran cantidad de maná que almacenan y que necesitan para teletransportarse desde su Esfera de Existencia hasta cada palacio de cada Gobernador de la correspondiente Esfera que los reclama y realizar el viaje de vuelta. También su Avatar esta formado por un éter ligeramente mas sutil que nuestro Avatar interior.

   Los recaudadores aparecen en la Esfera de Existencia a través del fenómeno de la tele transportación de los cuales son conocedores y se presentan en grupos de cuatro entre los que dos de ellos portan un Arca Divina para almacenar los frutos que la Esfera de Existencia quiere exportar hasta nuestro Agente Origenio. Son portadores de trompetas que hacen sonar cuando aparecen con una melodía breve pero bella.

   Los Aurifos están especializados en su función de recaudar los frutos que hemos comentado pero también sirven de enlace con Brama para informarle del valor de lo recaudado para que aquella lo tenga en cuenta a la hora de inyectar sus recursos. Por otro lado corren rumores que cuando el Supremo Hacedor presta atención a un punto concreto del Universo, los Aurifos aparecen allí a posteriori con una intención que se desconoce. Ya hablaremos en otra entrada de la Atención del Creador sobre su propia creación o el TODO (recordar que, como vimos, esta no es perenne sino más bien poco frecuente).